Registra influenza baja cobertura de vacunación

La mutación que año con año sufre el virus de la influenza aunado a que la población viene de un aislamiento después de la pandemia del Covid19 ocasiona que los cuadros gripales que se presentan sean más fuertes y resistentes a los medicamentos, con casos en el que los pacientes llegan a durar hasta dos meses con síntomas principalmente en grupos de riesgo, es decir, aquellos que padecen alguna enfermedad crónico degenerativa como la diabetes mellitus, asma o bronquitis, entre otras.

Lo anterior, fue dado a conocer por la especialista en infectología, Amira Azcorra Ruiz, quien también es pediatra del Hospital Carlos Canseco de Tampico.

Azcorra Ruiz refiere que las cifras de casos de influenza y COVID reportadas por el sector salud no corresponden a la realidad, pues el número de pacientes con el virus puede ser mayor debido a que no se hace un tamizaje de quienes acuden a consulta por tener un alto costo que puede superar los 5 mil pesos.

En ese sentido, la especialista en infectología rechazó que el sector salud esté ocultando información, “lo que está haciendo falta es que los pacientes se tamicen, pero tiene un costo muy alto, arriba de los 5 mil pesos”.

Además, señalo que los pacientes que acuden a un médico por un cuadro de resfriado común no acuden a valoración y no se les hace su prueba rápida de antígeno o en su defecto la famosa PCR la cual piensan que es solo para el COVID, pero también es para coronavirus, rinovirus, adenovirus, bacterias y todo tipo de virus.

Destacó que, en el caso de la prueba de antígeno, está es más rápida pero también pierde sensibilidad y especificidad cuando el paciente se encuentra con fiebre u otros síntomas, lo que puede dar falsos negativos, y recalcó, “la falta de numero de casos se debe precisamente a la falta de tamizaje, porque esto es muy costoso”.

GRIPES SON MÁS FUERTES

Azcorra Ruiz refirió que actualmente se están registrando enfermedades respiratorias con características muy diferentes, más severas, a las que se presentaban antes de la pandemia, pero se debe a que inmunológicamente venimos de poco más de 2 años de pandemia, periodo en el que se mantuvo el aislamiento desde que empezó el COVID, “eso es porque nuestro sistema inmunológico descanso y ahora que llega un nuevo virus que tiene la capacidad de simulación, la influenza, que muta cada año y los pacientes presentan cuadros gripales que duran hasta dos meses con una tos persistente”.

Explicó que la historia natural de la enfermedad de todos los virus inicia con ardor de garganta, posteriormente dolor de oídos, dolor de cabeza, flujo nasal y en algunos casos temperatura, pero que no duran más de 21 días, si llega a durar más tiempo es porque entonces ese virus tiene la capacidad de generar algo que se llama hiperactividad bronquial.

Detalló que eso sucede en los pacientes con esa predisposición, con padecimientos de asma, bronquitis, fumadores u otra situación que los hace ser predispuestos a que el virus cause una tos persistente que incluso dure más tiempo del estimado, precisamente porque después de la pandemia el sistema inmunológico descanso

y se encuentra más expuesto a los virus.

Mencionó que una gripa que dura más de 21 días ya no es normal y quiere decir que el virus le causo al paciente cierto grado de inflamación a los bronquios y se quedó en un estado pragmático por así decirlo.

El uso de antibiótico será necesario solamente cuando se detecte una infección bacteriana, los virus tienen una capacidad impresionante, si uno tiene bacterias en la boca o garganta, que son las bacterias que viven ahí y empiezan con una gripa persistente con fiebre o dolor que se pasa al oído e incluso a los pulmones, es porque el virus tuvo la capacidad de desregular las bacterias comensales no patógenas y convertirlas en patógenas.

Es común que las infecciones virales pasen al oído y como ya desreguló ya no es viral, se pasó a bacteriano, “el virus generó que nuestras propias bacterias nos ataquen a nosotros mismos, no es n fallo de un médico el diagnóstico, por eso es importante darle el seguimiento porque el 90% empieza como viral”.

CAUTELA EN EL USO DE RETROVIRALES

La especialista en infectología indicó que no es recomendable prescribir medicamentos retrovirales como el oseltamivir u otros cuando un cuadro gripal se vuelve resistente, pues al no ser necesarios llegan a ofrecer resistencia, al igual como sucede con los antibióticos.

Asimismo, señaló que en su experiencia nunca prescribe antibiótico por cuadros gripales, como suelen hacerlo muchos médicos porque desde el inicio no se hace un estudio adecuado.

Otro de los errores médicos es la prescripción de supuestos medicamentos antigripales que incluyen antivirales, como el caso de la amantadina, “desde el 2009 la amantadina no sirve es 100% resistente y no le hace nada a la gripa, no voy a decir marca, pero es un medicamento que contiene amantadina, clorfenamina, paracetamol y con efecto antiviral”.

Como una mejor opción, se encuentra la clorfenamina, “la amantadina no le va a hacer nada a la gripa, lo que hay que hacer es individualizar los casos”, apuntó.

INSUFICIENTE LA COBERTURA DE VACUNACION

Con respecto a la cobertura de vacunación de influenza, detalló que a la fecha debería encontrarse en un 85% en Tamaulipas, sin embargo, esta apenas se ubica en el 42% aproximadamente

“Las coberturas en Tamaulipas a esta fecha deberíamos tener más o menos el 85% del porcentaje de vacunación”.

Uno de los factores principales por el que el porcentaje de vacunación está por debajo de lo esperado es porque el sector salud solo contempla la vacunación para los grupos de riesgo entre los que se encuentran los médicos, personas con enfermedades crónico degenerativas, menores de 5 años, embarazadas, mujeres en lactancia, mayores de 60 años y el grupo de 50 a 59 años con alguna enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), como asma, cáncer, enfermedad renal, diabetes mellitus, cardiopatía, esos son los pacientes que se tienen que vacunar porque lo que que se está tratando de cubrir es lo que piden los lineamientos de México .

En Tamaulipas se lleva una tasa del 42 por ciento cuando lo que debiéramos tener es el 85 por ciento.

La infectologa pediatra refirió que hay una vacuna tetravalente que contiene los cuatro tipos de influenza AH1N1, AH1N2, AH1N3 y los tipos B, totalmente gratuita en el sector público y privado, pero lamentablemente la ciudadanía no acude a inmunizarse.

Incluso enfatizo que ni siquiera los menores de edad son vacunados, “se pone a partir de los seis meses, lo ideal es que la mujer embarazada se vacune en cualquier trimestre del embarazo para así poder darle anticuerpos de manera pasiva al bebé durante los primeros seis meses, reduciendo la mortalidad de madurez y cualquier complicación”.

Además, expuso que la segunda dosis, del refuerzo a las cuatro semanas, se encuentra en un 72.48% de cobertura porque se está faltando que regresen con el bebé para revacunar y poder completar la primo vacunación.

Reconoció que no todo es culpa del sector salud porque la ciudadanía también tiene que poner de su parte pues aún cuando hay campañas de vacunación estas no son aprovechadas por la población.

Además, mencionó que, en torno a las vacunas, COVID, influenza, o cualquier otra, circulan muchos mitos, reforzados incluso a través de medios de comunicación, ocasionando el miedo de la población que finalmente decide no inmunizarse.

“Hay que recordar que la vacuna de la influenza es un virus muerto, a la que se le quito un fragmento y de ahí se creo el biológico, el virus muerto no tiene la capacidad de causar una enfermedad”, apuntó.

Sin embargo, detalló que la influenza no circula sola, además existe el Virus Sincitial Respiratorio (VSR), rinovirus, adenovirus, todos los que virus que hacen se presenten cuadros de enfermedades respiratorias, eso significa que los efectos secundarios no serán por la vacuna, sino porque se venía incubando otro virus.

LA VACUNACIÓN SALVA VIDAS

La inmunización de la población contra la influenza o el Covid es de suma importancia, desde la primo vacunación a los seis meses, el refuerzo cuatro semanas después y hasta los 9 años, pues hay niños que hasta los 6 años no han recibido una sola dosis.

Después de los 9 años, la vacunación será por temporadas, no por año, en el caso de la influenza inicia en el mes de octubre y termina en marzo del siguiente año, actualmente se está aplicación la vacuna de la temporada 2023-2024, para octubre del presente año será un nuevo biológico

“Estamos en temporada, es importante mencionar que todo el año circula el virus porque se llama temporada de influenza ero de la semana 21 a la 39 se le llama temporada inter estacional, circula menos, pero en regiones geográficas de México, como Quintana Roo y Yucatán hay mas casos”.

Por último, insistió en que una vacunación en grupos de riesgo, con la tetravalente que se puede coadministrar con otras vacunas, es que se pueden salvar vidas, evitar complicaciones y muertes por hospitalizaciones, cuadros de asma que pueden presentar en niños con esa predisposición.

“Podemos evitar todas esas complicaciones, las tasas de ataque en las embarazadas y los lactantes disminuye hasta en un 70%”, concluyó.

Amira Azcorra Ruiz

La Dra. Amira Azcorra es Médica Cirujana egresada de la Universidad Autónoma de Tamaulipas.

Es especialista en pediatría por parte del Hospital General de Tampico «Dr. Carlos Canseco». También, cuenta con una especialidad en Infectología por parte del Instituto Nacional de

Perinatología «Isidro Espinosa de los Reyes».

A lo largo de su trayectoria, la Dra. Amira ha participado en diferentes publicaciones relacionadas con enfermedades infecciosas en niños.

Actualmente, es profesora en diferentes instituciones académicas como la Universidad Autónoma de San Luis, donde imparte la asignatura de Pediatría; también, imparte las asignaturas de Infectología Pediátrica en los hospitales CEMAIN y en el Hospital Ángeles, ambos en Tampico.

Asimismo, la Dra. Amira Azcorra es Presidenta del Comité de Infecciones Nosocomiales del Hospital Médica Universidad.

Además, forma parte de instituciones de salud como el Hospital General de Zona #6 del IMSS, ubicado en Cd. Valles, brindando atención al paciente crítico pediátrico y neonatal. También colabora en el Hospital CEMAIN de Tampico, especializándose en Infectología Pediátrica y Pediatría.