Y la austeridad que pregona la 4T y Morena, ¿donde quedó presidenta?
Nuevo Laredo, Tamaulipas, 10 de agosto de 2024 .— Parece que hay una clara desconexión entre las expectativas de austeridad y la imagen pública que está proyectando la presidenta municipal, Carmen Lilia Cantú Rosas. La percepción de que una funcionaria pública se involucra en un estilo de vida ostentoso, con prendas y accesorios costosos, mientras que su partido promueve principios de austeridad, genera críticas y cuestionamientos.
La ciudadanía se sienta frustrada cuando observa la Presidenta no parecen alinearse con los valores que prometieron representar. La austeridad no solo se trata de reducir gastos innecesarios, sino también de proyectar una imagen de responsabilidad y sensibilidad ante las necesidades de la comunidad. Como días pasados fue el caso de la pequeña Sofía Abigail.
Aunque se puede decir que la alcaldesa tiene derecho a gastar su dinero como desee, el hecho de que lo haga de manera tan pública y en contraste con los problemas y carencias de la ciudad puede ser percibido como insensible o incluso hipócrita, especialmente cuando esas imágenes se difunden en sus redes sociales.
Aun cuando no es un delito disfrutar de los lujos que uno se puede permitir, cuando se está en un puesto de poder, es esencial tener en cuenta cómo estas decisiones afectan la percepción pública y la confianza de los ciudadanos.