Se “estanca” la dirigencia estatal del PT en Tamaulipas

Ciudad Victoria, 30 de enero.-Luego de los cambios realizados a nivel nacional en el Partido del Trabajo (PT) a nivel estado la dirigencia sigue sin cambios, a pesar de las inconformidades de la militancia en contra de los líderes Arcenio Ortega Lozano y Alejandro Ceniceros Martínez.
En entrevista, Ortega Lozano confirmó que participará en la Asamblea Nacional para acelerar los cambios en la dirigencia petista, pero a nivel estatal seguirá al frente del partido que prestó sus siglas a candidatos de Morena en la pasada elección estatal, ya que el PT tuvo pocos candidatos, la mayoría personas que nunca han ganado una contienda electoral.
Los problemas internos del PT en Tamaulipas se intensificaron tras la definición de candidaturas para las elecciones locales de 2024, donde algunos militantes expresaron su desacuerdo con las decisiones tomadas por la dirigencia nacional y estatal, que cedieron las mejores candidaturas a Morena.
Aunque Ortega Lozano ha buscado la unidad ante los conflictos internos del PT, la situación no se ha arreglado ya que la militancia desconoce su liderazgo.
La inconformidad se centró en la falta de transparencia en los procesos de selección y en la percepción de que ciertos perfiles fueron impuestos, marginando a liderazgos locales con trayectoria.
Recientemente, una de las personas que no pertenecía al PT y que obtuvo la candidatura a la senaduría por Tamaulipas y que perdió en las urnas, la influencer Cendy Robles, fue nombrada como integrante del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido del Trabajo.
Este tipo de nombramientos han generado divisiones que amenazan con debilitar la estructura del partido en municipios clave como Reynosa, Matamoros y Ciudad Victoria.
No obstante, en una entrevista este miércoles, Arcenio Ortega Lozano, elogió el avance del PT al renovar su dirigencia nacional, a pesar de que la dirigencia estatal sigue sin cambios.
En el 2024, el Instituto Electoral de Tamaulipas entregó 18 millones 35 mil pesos, de los que solo 4 millones eran para gastos de campaña, y el resto, se lo gastaron los dirigentes locales en actividades “ordinarias”.