La justicia, como lujo exclusivo de quienes pueden comprarla, no Debe permanecer en este tiempo de transformación: Tania Contreras.

El tiempo de la corrupción debe quedar atrás, pues la justicia, como lujo exclusivo de quienes pueden comprarla, no debe permanecer en este tiempo de transformación, enfatizó la candidata a la Magistratura del Pleno del Supremo Tribunal de Justicia, Tania Contreras López.
“La impunidad en el sistema judicial debe ser erradicada y este es el momento para hacerlo realidad, Tamaulipas vive una etapa de regeneración en nuestra vida pública”, enfatizo, en su discurso de arranque de campaña.
Al pie del hemiciclo a Benito Juárez, reiteró que por años, los tamaulipecos han venido reclamando la actuación de juzgadores que se apartan de los principios de la justicia, reconociendo la hoy aspirante, que existe corrupción, que existe impunidad y eso es lo que ha llevado a esta nueva conformación de un poder judicial electo por los ciudadanos.
“La elección directa de los impartidores de justicia habrá de fortalecer de manera contundente nuestras instituciones, para dar paso a un nuevo poder, uno más sólido, más cercano, más íntegro, basado en la representatividad y comprometido con las causas sociales”, precisó la ex consejera jurídica.
Sus propuestas al cargo, aclaró, se sustentan en tres ejes fundamentales; primero, la justicia como motor de paz; el segundo, eje de prosperidad y, finalmente, el fomentar la participación ciudadana, pues todos sumados, construyen la justicia para el pueblo.
“A partir de la coordinación institucional con los diferentes poderes, es posible generar un modelo que atienda las causas que preceden el conflicto y el retorno a una convivencia solidaria”.
Contreras López, dejó en claro que en caso de llegar al Supremo Tribunal de Justicia y, a la presidencia de este órgano colegiado, se excusaría de los casos relacionados a la judicialización de las carpetas que se han integrado durante su periodo como consejera jurídica.
“Recordemos que en este proceso de judicialización, en su caso, de todas aquellas denuncias que se presentaron, conocen juzgadores que también obedecen a un criterio y una obligación de independencia. Al margen de que la magistratura coordine los esfuerzos de algunos de los jueces, finalmente ellos, en estricto apego a los principios que deben atender, deben guardar esa independencia; si en algún momento existiera un asunto en el que yo tenga un conflicto de interés, desde luego, excusarme de conocerlo, concluyó