Cae un 30 por ciento producción pesquera en Tamaulipas.
La pesquería en Tamaulipas atraviesa una etapa difícil, derivado de la extracción y cultivos de especies marinas, afectando tanto a consumidores como armadores, sobre todo en tilapia y bagre, de las cuales se han reportado caídas de hasta un 30 por ciento durante el 2023, reveló Juan Jesús Hernández Torres.
El Subsecretario de Pesca y Acuacultura admitió que la pesquería en la entidad vive una etapa difícil que se agudizó durante en el 2023.
En ese año la prolongada sequía que vivió Tamaulipas originó series problemas en los sectores productivos ya que todo el sistema lagunario que se alimenta por los escurrimientos de lluvias, contribuyó a que la reproducción de especies marinas disminuyera.
Especies como bagre, tilapia, lisa entre otras de tipo ribereña y de litoral, son las que los pescadores de oficio registraron hasta un 30 por ciento de baja captura, pues los bajos niveles de los cuerpos de agua y otras situaciones ambientales han ocasionado este desplome en dicho rubro de tal suerte que la producción de bagre, en la que Tamaulipas ocupó el primer lugar nacional, vino en franca decadencia.
“La producción de bagre se fue dejando; los sistemas productores bagres se fueron dejando en el olvido y definitivamente se vino abajo esta producción”.
El servidor público informó que el Estado se encuentra en estos momentos entre el séptimo y doceavo lugar en pesca y acuacultura, siendo la meta de la administración de Américo Villarreal Anaya, volver a ostentar el primer lugar en producción de especies de escama, destacando que la causa de que Tamaulipas se haya desplomado, fue el abandono con que la pasada administración manejó este tema.
Precisamente, y para contrarrestar esta problemática, Hernández Torres informó que la Subsecretaría ya cuenta con un esquema de 25 proyectos estratégicos que se aplicarán por etapas en 14 municipios.
“Y entre esos se incluye la producción de bagre y de hecho ya está en el centro acuícola Vicente Guerrero en Nuevo Dolores en el municipio de Abasolo y que son más de 40 hectáreas donde estamos en etapas para recuperarlo y esperando las condiciones para rehabilitación y poder generar ese centro de repoblación de bagre ahí precisamente”.
Al respecto, agregó: “si agregamos el cierre de las bocabarras que son muy importantes, más de 200 mil hectáreas de agua salobre que se tienen en la entidad, es el sistema lagunar más grande de Latinoamérica, pero en un sistema donde tenemos las barras cerradas, lo que impide que ingrese la cría de las diferentes especies en Tamaulipas y por ello se venga una situación de decadencia en la extracción, en la producción”.
Con estas acciones, el funcionario destacó que se busca que Tamaulipas vuelva a subir al primer lugar de la lista y que la producción pesquera se recupere al nivel que tuvo en sus mejores años.