Alerta máxima por llegada huracán Beryl
Mientras los remanentes de la Tormenta Tropical Alberto se desplazan por el interior del territorio mexicano, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) sigue de cerca una nueva zona de Baja Presión frente a las costas de Campeche con 50% de probabilidades de convertirse en ciclón tropical.
De acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC), se pronostica que se formará una amplia zona de baja presión sobre el sureste de México y el norte de Centroamérica para este viernes 21 de junio.
El Servicio Meteorológico Nacional informó que esta zona de baja presión se ubica 150 km al noreste de Tampico y 130 km al sureste. Este sistema mantiene al momento un 40 por ciento de probabilidad de evolucionar a depresión tropical en las próximas horas y se estima que ingrese a tierra durante la noche de este domingo con vientos de 40 a 50 km/h.
Derivado de este fenómeno meteorológico seguirán las lluvias fuertes en el estado, así como alta probabilidad de formación de trombas marinas en la costa.
El sistema se mueve desde el pasado viernes sobre la Bahía de Campeche y las condiciones parecen propicias para un desarrollo gradual a una tormenta tropical, por lo que se prevé se le asigne el nombre de ciclón Beryl.
Esta depresión sobre el suroeste del Golfo de México tiene 40% de probabilidades de desarrollo ciclónico, especificó el Centro Nacional de Huracanes, mientras que el SMN considera que el potencial a una semana es de 50%.
Hasta el momento tiene un 40% de posibilidad para desarrollo ciclónico y de ser así llevaría el nombre de Beryl evolucionará rápidamente a huracán convirtiéndose en un huracán de categoría 4 y la llegada de Beryl está estimada para que toque tierra en México este lunes 24 de junio, situación que pondría en riesgo a varias entidades del sur de Texas con potencial de tornados en un 90 % como Chihuahua, Coahuila, Nuevo león, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Quintana Roo y Yucatán.
De llegar a las costas mexicanas, Beryl Tocaría tierra como categoría 4 en las costas de Tamaulipas y Norte de Veracruz dejaría graves afectaciones como marejadas ciclónicas con el aumento repentino del nivel del agua; fuertes vientos; así como lluvias Torrenciales.