No son iguales, son peores
Tiene mucha razón el presidente López Obrador cuando en forma reiterada ha expresado que no son iguales a los priístas o panistas en el modo de negociar las reformas constitucionales, puesto que son peores luego utilizan la intimidación, el chantaje y la compra de votos en forma burda y descarada, como lo acaban de hacer el coordinador de la facción de Morena en el Senado, Adán Augusto López Hernández y el director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), general Audomaro Martínez Zapata.
Ambos operadores de López Obrador lograron que el senador Miguel Ángel Yunes Márquez del PAN solicitara ayer licencia para que entrara en su lugar su padre y a la vez suplente Miguel Ángel Yunes Linares, quien es todo un “pájaro de cuenta”, por lo que seguramente negocio que le desaparecieran varias cuentas pendientes de corrupción para que hoy vote a favor de la reforma judicial.
Yunes Márquez presentó una responsiva médica para justificar su solicitud de licencia, pero lo cierto es que corrió como cobarde a fin de no votar en contra de la reforma judicial como se había comprometido, en tanto que su padre y suplente Yunes Linares llegó ayer a la Cámara de Senadores y sin ningún rubor de sentó en la bancada morenista, incluso López Hernández salió a darle la bienvenida para que se sintiera “bien a gusto”.
No fue el único legislador de la oposición que fue presionado para que se cambiara de bancada, puesto que ayer corrió “como reguero de pólvora” la noticia que el senador Daniel Barreda Puga de Campeche había cedido y se incorporaría a la fracción de Morena, cuya versión fue desmentida por coordinador de Movimiento Ciudadano en el Senado, Clemente Castañeda Hoeflich.
Incluso, el senador Barreda Puga denunció desde la semana pasada que la gobernadora Layda Sansores San Román de Campeche lo había presionado e incluso intimidado para que vote a favor de la reforma judicial de López Obrador, por lo que reiteró que está en contra.
Otros de los 43 senadores de la oposición también recibieron “jugosas ofertas”, que van desde gubernaturas hasta cantidades millonarias, sin descartar otras medidas de presión, como fue el caso de Antonio Martín del Campo de Aguascalientes, Mayulli Latifa Martínez Simón de Quintana Roo, quienes se comprometieron a no ceder y votar en contra de la reforma judicial.
Si bien es cierto que los operadores políticos de antes, es decir aquellos que realizaron negociaciones para lograr el consenso de las reformas constitucionales complicadas o trascendentales, como es el caso de la reforma judicial, ofrecieron canonjías políticas y económicas, ahora tanto López Hernández como Martínez Zapata en forma descarada y abierta han chantajeado e intimidado a los senadores de la oposición.
Nadie duda que hoy se apruebe la reforma judicial en el Senado de la República a pesar de que existen voces de alarma de lo perjudicial que será para el futuro de nuestro país, como ayer se pudo constatar cuando el dólar rebasó los 20 pesos y las pérdidas registrada en las bolsas de valores de nuestro país.
Por otra parte, la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del Instituto Nacional Electoral (INE) rechazó validar la reforma a los estatutos del PRI, entre otros motivos, porque ésta se realizó el pasado 7 de julio, cuando aún no concluía la calificación de la elección presidencial.
Con el rechazo de las reformas a los estatutos del tricolor, la Comisión del INE dio también un fuerte revés a la reelección de Alejandro Moreno Cárdenas, quien promovió las modificaciones de las reglas internas para permanecer en la dirigencia hasta el 2028, incluso con la opción de reelegirse otra vez y estar al frente del otrora partido de las mayorías hasta el 2032.
El revés que sufrió ayer el campechano Moreno Cárdenas fue aplaudido por los expresidentes del PRI, como es el caso Dulce María Suari Riancho, Beatriz Paredes Rangel, Manlio Fabio Beltrones Rivera, entre otros, que seguramente buscarán que se realice una elección interna para renovar la dirigencia nacional para que periodo 2024-2028.
Lógicamente que Moreno Cárdenas buscará impugnar la decisión de la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del INE, pero como dice el viejo refrán: “Palo dado, ni Dios lo quita”.
En otro tema, tal y como se esperaba, el pleno del Tribunal Electoral de Tamaulipas (Trieltam), validó ayer los resultados de la elección en el distrito electoral 03 con cabecera en Nuevo Laredo, ratificando el triunfo electoral de Sergio Arturo Ojeda Castillo.
La decisión será analizada por la Sala Regional del INE en Monterrey luego de que antes la había rechazado luego de que la impugnación del candidato de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, Héctor Martín Canales González, la presentó en tiempo y forma.
Se espera que una vez regularizado el proceso, la Sala Regional del INE en Monterrey, valide el triunfo de Ojeda Castillo por tener una ventaja de más de 9 mil votos con su competidor Canales González.
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