Sigue la lucha de trabajadores del PJF
Aunque todo está listo para que hoy sea votada y hasta aprobada la iniciativa de reforma judicial en la Cámara de Diputados por la mayoría de Morena y sus aliados, los trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) salieron ayer a las calles para protestar en contra de este cambio constitucional impulsado por el presidente López Obrador en varias partes del país, como ocurrió aquí en Ciudad Victoria, cuya marcha se inició en el edificio sede ubicado en el bulevar Praxedis Balboa Gojón y culminó en la escalinata del Palacio de Gobierno.
Los trabajadores del PJF señalan, con toda razón, que la reforma judicial no busca mejorar la impartición de justicia en nuestro país, puesto que la iniciativa no sólo pretende acabar con la carrera judicial de méritos y capacidades, sino también quitar el contrapeso que tiene el poder judicial para evitar los excesos que ha tenido el poder presidencial.
Coinciden plenamente con la opinión del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, quien el pasado viernes afirmó que la reforma judicial es una venganza visceral y una represalia política sin precedentes, durante una conferencia que dictó ante estudiantes y académicos de la Universidad de Monterrey (UDEM).
Incluso, respaldan totalmente lo expresado por el ministro González Alcántara Carrancá acerca de la iniciativa de López Obrador, puesto que no plantea una solución a las deficiencias en la impartición de justicia y sólo busca que los tribunales realicen su trabajo con obediencia y subordinación.
“En resumen, no se trata de mejorar la eficacia, sino de castigar la desobediencia”, dijeron los trabajadores del PJF.
Saben que los actuales legisladores de Morena y sus aliados dejarán listo el dictamen de la reforma judicial como un regalo de despedida para López Obrador, pero que será la “aplanadora legislativa” que habrá a partir del próximo 1° de septiembre la que se encargará de aprobar.
A propósito, el virtual coordinador de la fracción de Morena en la Cámara de Diputados a partir del próximo 1° de septiembre, Ricardo Monreal Ávila, anunció que después de la ceremonia de instalación de la LXVI Legislatura Federal en esta misma fecha habrá una sesión en donde se prevé discutir la iniciativa que busca que jueces, magistrados y ministros sean designados por medio del voto popular.
Se ve que Monreal Ávila trae prisa por cumplir el capricho de López Obrador, ya que no quiere desaprovechar ningún momento y citará a los diputados de la LXVI Legislatura Federal para aprobar la iniciativa de reforma judicial que le dejarán lista sus antecesores.
De regreso a la lucha que realizan los trabajadores del PJF, saben que todo se encuentra listo para que la mayoría de Morena y sus aliados aprueben la iniciativa de reforma judicial, pero ante este hecho surge la decisión defender sus derechos laborales y sobre todo el papel relevante que juega el poder judicial como contrapeso del poder ejecutivo a fin de no llegar a una dictadura, como ha sucedido en otros países, entre los que se encuentra Venezuela y Nicaragua.
De ahí, la importancia de su lucha por defender la carrera judicial a pesar de que tienen todo en contra, por lo que su convicción es digna admirarse porque dejarán sembrada la inquietud de defender el equilibrio de poderes que marca la constitución mexicana.
En otro tema, la titular de la Secretaría Académica de la UAT, doctora Rosa Issel Acosta González, reveló que la matrícula creció en alrededor de un 15%, por lo que poco más de 9 mil 500 alumnos iniciaron y reiniciaron sus estudios en el ciclo escolar que se inició el pasado 19 de agosto en nuestra alma mater.
Destacó que el incremento en la matrícula es producto de la promoción que se ha hecho de las carreras que ofrece la UAT tanto en el país como en el extranjero, puesto que hay estudiantes provenientes de otras entidades federativas a nivel licenciatura, así como personas que realizan sus estudios de posgrado a través de internet.
Añadió que la UAT representa una opción de estudio y preparación que se refleja en cada periodo escolar.
Por otra parte, pero sin dejar el tema de la UAT, el Órgano de Control Interno a cargo de la contadora María del Rosario Flores Salomón, ofreció un curso de capacitación a todo el personal administrativo acerca del manejo transparente y la rendición de cuentas de los recursos públicos que manejan.
El curso de capacitación se realizó en el auditorio del Centro de Excelencia de la UAT, Campus Victoria, en donde se destacó la importancia fundamental de cumplir con las disposiciones legales en materia de transparencia y rendición de cuentas en el desempeño de las funciones universitarias.
De igual forma, se abordaron aspectos críticos como la gestión de solicitudes de acceso a la información y las posibles repercusiones legales y financieras en caso de incumplimiento.
En otro tema, el titular de la Dirección General de Materiales Educativos de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Marx Arriaga Navarro, antes de irse hizo una nueva tropelía, ya que se gastó más de 87 millones de pesos para adquirir 4 millones 320 mil libros de pedagogía marxista que estarán en las bibliotecas de las escuelas públicas.
Arriaga Navarro insiste en el adoctrinamiento marxista en lugar de promover la cultura en los niños y jóvenes de educación básica, seguramente con el beneplácito de López Obrador.
No conforme con incluir ideas de izquierda en los libros de texto de primaria y secundaria, ahora se dio a la tarea de llenar las bibliotecas públicas de la colección de Paulo Freire, cuyos títulos van desde la “Pedagogía de oprimido” hasta la “Pedagogía de la Esperanza”.
Sólo falta que la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo lo ratifique para que siga con el adoctrinamiento marxista a través de la Nueva Escuela Mexicana (NEM) para niños y jóvenes de educación básica.
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