¿A quién le interesa que le vaya mal a Tamaulipas?
Esa es la pregunta que en las últimas horas nos hacemos muchos tamaulipecos, si no es que, la mayoría.
Es innegable que los sucesos de violencia suscitados el fin de semana en tres municipios, protagonizados entre bandas rivales, fueron el detonante para que personajes “anónimos” con ambiciones de poder político, se encargaran de exagerar los hechos, como si hubiera existido una masacre de personas civiles, como ocurría en tiempos pasados.
De inmediato las distintas redes sociales dieron cuenta de videos y audios de las amenazas y retos lanzados entre los grupos antagónicos, durante esa jornada de violencia.
Aquí cabe una pregunta importante:
¿Quién filtra esa información a la sociedad civil y para qué?
Al parecer hay personajes del pasado que siguen si reconocer que los tamaulipecos votaron por un cambio de régimen.
Hace casi un mes “esos” mismos alentaron un presunto rompimiento entre periodistas.
El objetivo no fructificó, pues los comunicadores siguen unidos, en su gran mayoría y desde siempre se han respetado las ideologías y los muy distintos puntos de vista y opiniones de los verdaderos periodistas.
Hoy desde el anonimato quieren “incendiar” el estado y están fracasando.
Es preciso poner sobre la mesa que la inseguridad y la violencia, nuca se han ido de Tamaulipas.
Ningún gobierno, en los últimos 18 años, la ha podido contener.
Son un mal, con el que tristemente ya nos acostumbramos a vivir desde hace años.
Lo que pasó el fin de semana no es nuevo.
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Pero lo que sí es nuevo, es que, oscuros intereses traten de desestabilizar a la ciudadanía, intentando esparcir el terror y la zozobra, como armas para desacreditar al gobierno en turno.
Y la pregunta flota en el aire:
¿A quién le interesa que le vaya mal a Tamaulipas?
Hasta aquí mi Análisis y Comentario.
Soy su amigo Christopher… Mora.
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