Para llorar…
De líderes de comunidades y regiones a simples monigotes, figuras de decoración, de ornato, a eso ha reducido la Secretaría de Educación a los maestros tamaulipecos. Vaya, ya ni siquiera tienen la posibilidad de evaluar a los alumnos con notas reprobatorias, por orden de sus autoridades todos pasan y en caso de que haya dudas deben ir a consultar a los padres de familia y estos últimos darán el visto bueno sobre el siguiente paso a tomar con sus hijos, pero nunca deben decidir ellos que un estudiante repita año, no por cuenta propia.
No son especulaciones, ni chismes, ni siquiera un meme o chiste, es la triste realidad que tenemos en el Estado y es dibujada por Mario Gómez Monroy, el propio titular de la Secretaría de Educación en Tamaulipas, la SET, que a pregunta expresa y que se publica por la reportera Daisy Herrera respondió así:
“Luego se preguntan muchos si el niño de al lado va a pasar o no, ocúpate por el tuyo… pero si he sido muy insiste con directores, con los maestros, para que aquellos niños que no tuvieron el suficiente contacto con ellos en las clases, que platicaran con los padres de familia y ya en una plática en común tomar el acuerdo de que los niños se quedarán, que repitieran el año o no”.
Dirá usted que todo lo que se aprende en primaria no sirve de mucho, que la gran mayoría de nosotros lo hemos olvidado, tal vez este a favor de la estúpida postura de que los niños a los que se obliga repetir un año se pueden traumar o sufrir bullying de sus compañeros, sin embargo, los hechos nos dicen todo lo contrario, más aún, maestros universitarios, de las privadas y las públicas, han llegado a afirmar en los últimos años han recibido alumnos que no saben leer correctamente, que no saben escribir sin errores, que batallan para hacer operaciones matemáticas básicas.
Claro, si usted duda todo lo que le digo busque a un maestro de secundaria y pregunte como llegaron los que egresaron de sexto grado de primaria el año pasado o en los anteriores ciclos que van casi igual, y el nivel de aprendizaje de los niños que lanzó a la secundaria tampoco es bueno y sobre los que egresan de las preparatorias ya les platicamos.
Por supuesto que lo peor de todo lo que se ve en el sistema educativo era no evaluar al magisterio, era, hoy no evaluar a los alumnos o permitir que sigan avanzando de grado lo ha sustituido, porque los niños atrasados causaran mucho problema a sus compañeros, un maestro de secundaria tendrá que repasar las sumas, restas, la lectura y la escritura básica sin importar que la mitad o una parte ya domine todo ello, por mencionar algunos de esos problemas.
Claro que Gómez Monroy se refería al tema de la pandemia, pero antes de la misma era similar la situación, los niños ya no repiten año desde hace muchos ciclos, ya no reprueban y, como consecuencia, tampoco avanzan mucho y se retrocede en lo general, los efectos del Covid solo fueron hacer evidente la situación.
Y no, los malos no son los maestros, o no todos, ha que reconocer la responsabilidad y el arduo trabajo de muchos de ellos, su terquedad por educar y enseñar con mucha calidad a sus niños, son la gran mayoría también hay que decirlo, como tampoco podemos soslayar que por unos cuantos la llevarán todos, lo peor es que el país en unos cuantos años puede desmoronarse ante futuros profesionistas que no podrán ni escribir sus nombres correctamente porqué, a como vamos, es posible que hasta en la educación superior se de una orden de no evidenciar lo malo del sistema educativo en los niveles básicos.
Se tiene que cambiar y empezar a hacerlo ya si no queremos atrasarnos más, el primer paso es capacitar a los maestros para
que aquellos niños que no tuvieron el suficiente contacto con ellos en las clases, que platicaran con los padres de familia y ya en una plática en común tomar el acuerdo de que los niños se quedarán, que repitieran el año o no”.
Dirá usted que todo lo que se aprende en primaria no sirve de mucho, que la gran mayoría de nosotros lo hemos olvidado, tal vez este a favor de la estúpida postura de que los niños a los que se obliga repetir un año se pueden traumar o sufrir bullying de sus compañeros, sin embargo, los hechos nos dicen todo lo contrario, más aún, maestros universitarios, de las privadas y las públicas, han llegado a afirmar en los últimos años han recibido alumnos que no saben leer correctamente, que no saben escribir sin errores, que batallan para hacer operaciones matemáticas básicas.
Claro, si usted duda todo lo que le digo busque a un maestro de secundaria y pregunte como llegaron los que egresaron de sexto grado de primaria el año pasado o en los anteriores ciclos que van casi igual, y el nivel de aprendizaje de los niños que lanzó a la secundaria tampoco es bueno y sobre los que egresan de las preparatorias ya les platicamos.
Por supuesto que lo peor de todo lo que se ve en el sistema educativo era no evaluar al magisterio, era, hoy no evaluar a los alumnos o permitir que sigan avanzando de grado lo ha sustituido, porque los niños atrasados causaran mucho problema a sus compañeros, un maestro de secundaria tendrá que repasar las sumas, restas, la lectura y la escritura básica sin importar que la mitad o una parte ya domine todo ello, por mencionar algunos de esos problemas.
Claro que Gómez Monroy se refería al tema de la pandemia, pero antes de la misma era similar la situación, los niños ya no repiten año desde hace muchos ciclos, ya no reprueban y, como consecuencia, tampoco avanzan mucho y se retrocede en lo general, los efectos del Covid solo fueron hacer evidente la situación.
Y no, los malos no son los maestros, o no todos, ha que reconocer la responsabilidad y el arduo trabajo de muchos de ellos, su terquedad por educar y enseñar con mucha calidad a sus niños, son la gran mayoría también hay que decirlo, como tampoco podemos soslayar que por unos cuantos la llevarán todos, lo peor es que el país en unos cuantos años puede desmoronarse ante futuros profesionistas que no podrán ni escribir sus nombres correctamente porqué, a como vamos, es posible que hasta en la educación superior se de una orden de no evidenciar lo malo del sistema educativo en los niveles básicos.
Se tiene que cambiar y empezar a hacerlo ya si no queremos atrasarnos más, el primer paso es capacitar a los maestros para empoderarlos no solo en el aula, también en la sociedad y ello se logrará, de entrada, al pagarles mejor; el segundo paso será revisar bien el tema de las evaluaciones, entender que no todos tenemos la misma capacidad y encontrar mecanismos para que algunos niños reciban cursos más adelantados que otros, por lo menos, y obligarse a regularizar a los que se vayan atrasando con métodos intensivos porque de lo contrario agrandaríamos la brecha entre los pobres y los ricos.
Obvio, nadie tomará esa medida, es muy difícil pagar su costo político, social, enfrentar a los padres y a los maestros, por eso estamos para llorar, porque lejos de corregir las deficiencias se toma el camino más sencillo de pasar a todos de grado o dejar a los padres la responsabilidad de aprobar o no a los niños como si esa actitud no trajera consecuencias en el resto de un grupo, peor aún, de toda esta generación de estudiantes que con tristeza se observa que podemos perder, más riesgo sería de seguir actuando de la misma forma que hoy se hacen las cosas…
BECA LA UAT A ESTUDIANTES DE EXCELENCIA… El C. P. Guillermo Mendoza Cavazos, Rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), presidió la entrega de becas de excelencia a más de doscientos estudiantes de las escuelas, unidades académicas y facultades del Campus Victoria y de Ciudad Mante, mediante las cuales se reconoce el rendimiento académico de los mejores alumnos de cada carrera.
Durante el evento desarrollado en el Teatro Juárez de la UAT, el Rector Guillermo Mendoza estuvo acompañado de la Dra. Cinthya Patricia
Ibarra González, Secretaria de Gestión Escolar; y de la Dra. Mariana Zerón Félix, Secretaria de Investigación y Posgrado.
En su mensaje, el Rector felicitó a los jóvenes por su esfuerzo y rendimiento académico que les han permitido alcanzar la meta de una beca de excelencia que otorga la Universidad a sus mejores estudiantes.
Subrayó que las becas de excelencia se siguen impulsando en la UAT como un reconocimiento y apoyo al esfuerzo de sus estudiantes, y de igual forma los exhortó a que aprovechen todos los esquemas y servicios que se han diseñado para ayudarlos en fortalecer su formación.
Por su parte, la Dra. Cinthya Patricia Ibarra González dijo que las becas de excelencia tienen como propósito promover la equidad educativa y reconocer los esfuerzos académicos, además de alentar a los jóvenes a que concluyan sus estudios.
Refirió que la UAT cuenta con distintos esquemas para apoyar al alumnado durante su trayectoria escolar y reconoció el esfuerzo del Rector Guillermo Mendoza Cavazos para seguir otorgando los distintos estímulos que benefician la formación universitaria.
A nombre de los beneficiarios, Osvaldo Avalos González, estudiante de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, agradeció a la UAT el esfuerzo para seguir otorgando becas a los jóvenes, ya que —dijo— muchas veces sirven para cumplir con las obligaciones económicas que les representa cursar una carrera universitaria.
“Gracias, Rector, por el estímulo económico y por el reconocimiento que se nos otorga por nuestro mérito académico”, agregó.
En la ceremonia acompañaron al Rector el Mtro. Jeancarlo Recalde Montemayor, Director de Becas y Estímulos Educativos; y el Mtro. Raymundo Rommel Regalado Hernández, Director de Servicios Escolares. También asistieron los titulares de las escuelas, unidades académicas y facultades de Ciudad Victoria y Ciudad Mante, cuyos planteles corresponden a la Zona Centro de la máxima casa de estudios en la entidad
Coloque en el buscador de Facebook @CENADeNegros1 y le agradeceré que me regale un Me Gusta, además nos puede seguir en la cuenta de twitter @gatovaliente y, como siempre, le dejo el correo electrónico a sus ordenes para lo que guste y mande… [email protected]