Pilas que matan: ¿Quién se hace responsable?

Cada pila que tiramos al bote de basura puede contaminar hasta 600 mil litros de agua. Y sin embargo, miles de ellas terminan en lotes baldíos, drenajes o basureros comunes. La asociación ambientalista Tonantzin Tlalli lanzó una pregunta incómoda:
¿Qué haces tú con las pilas que ya no te sirven? La respuesta, para muchos, es: nada. Pero hay dependencias que sí tienen responsabilidad directa: Conagua, encargada de velar por el recurso hídrico, y Comapa, que gestiona el agua potable y el drenaje en la ciudad.
Tere Baeza, presidenta de Tonantzin Tlalli, expresó su preocupación por la falta de acciones concretas:
“Las pilas contaminan demasiado. Necesitamos centros de acopio, campañas informativas y coordinación entre instituciones”.
¿Qué deberían hacer?
– Instalar centros de acopio en colonias y escuelas.
– Informar a la ciudadanía sobre los riesgos de tirar pilas a la basura.
– Coordinarse con Semarnat para el destino final de residuos peligrosos.
El riesgo invisible
Las pilas contienen metales pesados como mercurio, cadmio y plomo, que pueden filtrarse al subsuelo y llegar a los mantos acuíferos. El daño es silencioso, pero devastador.
¿Y Conagua? ¿Y Comapa?
Si Conagua y Comapa ya tienen protocolos para el manejo de pilas, urge que los difundan. La ciudadanía no los conoce. Y si no los tienen, es momento de actuar, porque cada pila que se tira sin control es una bomba silenciosa contra el agua que todos bebemos.